Capítulo n°3: "Ellos"

[Cuenta Vale]

Eran las 4:15 de la mañana cuando me desperté, la hora ideal. Veríamos el amanecer y, además con todo lo que nos demoraríamos, saqué la cuenta y a esta hora podríamos hacer todas las cosas tranquilamente y aún así llegar a la hora.
Me levanté y tomé una almohada, me acerqué a Marianne muy sigilosamente; no quería despertar a Vanesa aún , se veía tan tierna durmiendo.

Jejeje... le tiré la almohada en la cabeza y Marianne despertó con un fuerte grito

-¡Hey!, estúpida ¿cómo se te ocurre semejante estupides por la...?
-Shhh...callate,¿quieres?,¿o quieres despertar a Vanesa?- le dije en un susurro
-Pero, ¿cómo se te ocurre despertarme así?, me diste un susto de muerte- dijo susurrando
-Levantate, tenemos que arreglarnos para pescar
-Además si tenemos que despertar a Vanesa.


Me vestí dejando a Marianne el trabajo de despertar a Vanesa y yo me dirigí hacia las habitaciones de los hombres , donde lo llamé por telefono , ya que no debía entrar.


-¿Qué querí? - me preguntó Cristopher medio dormido.
-Despierta y levántate flojo , te estoy observando
-¿Donde? - sentí que se levantaba estrepitosamente - ¿Donde estás, depravada?
-Detrás tuyo.
-Imposible , hay una pared ... ¡MENTIROSA!


Despues de un rato de conversación se vistió, salió y fuimos al jardín donde nos reuniriamos para desayunar.

Desayunamos y a las 4:50 ya estabamos listos, con las cañas en la mano y subidas al bote.

-Es muy fácil, sólo tienes que tirarlo y esperar- nos dijo Jake.

10 minutos después...

-¡Pesqué, pesqué!- yo era la única que había logrado pescar junto con Jake.
-¿Por qué eres la única?- me preguntó Marianne
-Jeje
-¡No se vale!, los peces tienen un complot en contra de nosotros 3- reclamó Cristopher
-Cierto- afirmó Vanessa

10 minutos más..

-Estoy aburrida, ¿por qué no podemos pescar?- preguntó Marianne
-Chicas- la pita de Vanessa comenzó a tensarse-¿qué le pasa a mi caña?
-Ha picado algo, ¡bien Vanessa!- la felicitó Jake; se pone detras de ella y la ayuda.

Al parecer, el pez era muy grande y pesado ya que el bote se sacudió y caimos directamente al agua.

-Intenten moverse, así estarán a flote y se mantendran "tibias"- les dije
-¿¡Cómo quieras que estemos tibias con este frío!?- dijo Marianne
-Me refiero a que su cuerpo se congelará menos rápido
-¡Ayuda,ayuda!


Cristopher se fue nadando solo a la orilla , maldito desgraciado , claro , nosotras aquí ahogandonos , y yo la muy so tonta ayudando a Marianne que no sabía nadar.

Jacob vá directamente a ayudar a Vanessa, la suerte. Poco a poco el agua helada comenzó a congelar nuestros músculos.¿De esta forma moriré?, ¿este es el final de todo, no?. Nunca espere que Porvenir acabaría con mi vida. Al parecer las clases de natación no me sirvieron de nada, ya que mi final iba a ser igual que el de ellas.
Vi unas siluetas que se lanzaron al agua.¿Cómo se les ocurría? Nosotras muriendo y ellos se daban un baño...
Alguien se acercó a mi y me tomó. Pobre de mí, estoy alucinando. Ya no supe más porque caí en la inconciencia.

Desperté de golpe al recordar lo sucedido.

-No hagas esfuerzos- me dijo alguien que no reconocí
-¿Dónde estoy?- No sabía, estaba completamente desorientada- ¿estoy muerta?
-No, tuviste un accidente junto con tus amigas- me dijo Sor Ingrid
-¿Cómo están?- me senté en la cama, me dolía todo el cuerpo.
-Esta bien, afortunadamente él estaba ahí para ayudarte- al parecer era la enfermera.
-¿Él?, ¿Quién es él?
-Joshua Walker fue la persona que te ayudó- dijo Sor Ingrid, mostrandome a un chico.

Era alto, creo que más de 1.8 mts. Tenía la piel pálida y blanca; cabellos cobrizos. Era en una simple palabra: HERMOSO.

-G-gra-gracias- balbucee; él sólo asintió con su cabeza, ¿tenía algún problema?
-Descansa, ya todo pasó- me dijo la enfermera
-Tengo hambre...


[Cuenta Vanesa]

¡Ay!, he tenido un sueño demasiado raro...He soñado que Jake y yo estabamos solos en un universo paralelo color azul marino. Me pesaban mucho los párpados pero hice un esfuerzo grandísimo para abrírlos; y lo logré. Estaba en una habitación blanca; estaba de verdad cómoda en la cama. Quizás mi sueño no haya sido del todo una fantasía.

-Ehh...Vanesa, ¿cómo te encuentras?- la voz de jake no era más que un susurro, pero fue más que suficiente para que mi corazón comenzara a latir desenvocadamente. Menos mal que no estaba conectada a esa maquina que muestra los latidos del corazón.
-Emmm....bien, gracias por preocuparte. ¿Qué pasó?. Primero que nada: ¿cómo estas?, ¿te encuentras bien?, ¿te duele algo?- parece que mi actitud resultó un poco desesperada; incluso después me sentí patética.
- Esto...estoy mejor, gracias.

¡Kia!... estaba tan agradecida con Jake por salvarme la vida...¡ya está!, estaba decidida a levantarme, acercarme más a él y darle un beso. O algún gesto de cariño, como un fuerte abrazo o algo que demostrara mi agradecimiento por lo que hizo. ¡Ya!, ¡me decidí! y no iba a arrepentirme. ¡Sí! Vanesa es una chica fuerte. Me estaba levantando para acercarme a Jake.

-¡Hey!, ¿qué estas haciendo?- dice Marianne que abriendo la puerta
-Marian- dije, como cariñosamente la llamo.

Marianne se acerca y deja a Jake de lado

-¿Estas bien?
-Claro, claro. Yo no muero así como así... ¿Qué a pasado?- le pregunté
-Lo que pasó fue que perdimos una caña de pescar y un pez por curiosas- ¿qué quizo decir?- me explico: cuando trataste de sacar tu pez del agua, todos nos fuimos a ese lado del bote para ver mejor tu "pesca" y con la fuerza del pescado y nuestro peso se dio vuelta el bote y caimos al agua
-Aaaaa... gracias por explicármelo

Bueno, después de eso Marianne se despidió y salió de la habitación.

-Vanesa, realmente me alegro de que estes bien
-Jake, yo...Te agradezco mucho, me haz salvado la vida- ¿Por qué vacilaba tanto?, ¿tanto me gustaba?. Yo quería gustarle a él, queria que él me quisiera. Era una pena no saber como.
-Era lo mínimo que podía hacer por ti.

¡Kia!, este chico además de ser guapo, es todo un caballero. Se ha ganado mi corazón, ahora falta que yo me gane el suyo, ¿pero cómo?.


[Cuenta Marianne]

Ya han pasado 2 días desde el incidente... No ha pasado nada en realidad, solo que, TODAS estaban medias grogui por sus salvadores. Eh, bueno, yo quizás también un poco. Me explico:

Yo iba caminando hacia la biobliotece para ver si podía encontrar algo de información más detallada sobre vampiros y todas esas cosas que refuerzan mis teorías. Además Vanesa estaba muy entusiamada con un libro llamado "El Alquimista" y quería que se lo llevara...niña loca...
Iba un poco distraida tratando de acordarme del nombre de un libro que buscaba cuando, de repente, me di un cabezazo con alguien. ¡Que verguenza!.

-¡Oh!, disculpa- me dijo un chico rubio, de como 1,78 mts. y con los ojos del color de los perros siberianos- ¿te encuentras bien?
-Si, lo lamento yo... ¡tú!- él hizo un gesto de sorpresa- ¡Tú eres quién me salvo ese día!
-¡Oh!, yo pensé que ya me habías olvidado
-Pero cómo me iba a olvidar... mucho gusto, me llamo Marianne Negrón - le tendí mi mano para, bueno, un apretón de manos. Cuando..
-Mucho gusto- me coge la mano y me la besa- Noah Walker, un placer.

Sentía cómo me iba ruborizando, por suete no era de aquellas personas que se ponen como un tomate xD

-¿Donde te diriguías?- me preguntó
-A la biblioteca...el día está muy aburrido, ¿no crees?- era día Domingo.
-umm...¿puedo acompañarte?
-Si, claro, me encantaría.

Noah sonrió amablemente. Conversamos toda la tarde, aunque la biblioteca no era un lugar muy apropiado para hablar. Busqué los libros que necesita y después él me acompañó a dejarlos a mi cuarto; después nos diriguimos a la cafetería.

-Espero no haberte desviado de tus deberes
-¿Deberes?. No, no eran deberes- preferí no mencionarle nada sobre los libros sobre vampiros y cosas por el estilo porque podía creer que estaba loca- eran simplemente para pasar el rato- y le regalé una sonrisa de confianza.

Y así seguimos conversando hasta que las chicas me llamaron para hacer no se que cosa. Ellas eran mis amigas desde antes, no podía simplemente dejarlas botadas por un chico que apenas conocía...

[Cuenta Vale]

Raro... vi a Marianne con un chico...¿Será su novio?, estaba bien bueno...pero nunca tan bueno como Joshua. Pero, si era su novio...De verdad que tiene buen gusto, en fin, luego me meteré en su vida privada xD

Estaba caminando por los largos pasillos del instituto, reflexionando no se que, pero reflexionando. Las clases estaban a punto de comenzar. ¿Quién será mi compañera de puesto?. Espero que Vanesa, porque es tan mona; me sorprende que no se haya hechado novio...Demás que se pone de noviazgo con ese mastodonte de Jake, solo será cuestión de tiempo. Yo también me quiero hechar un novio...¡Cualquier ser humano puede!, ¡Hasta Christopher ya tiene novia!... De todos modos yo sólo quiero UN novio. Mi salvador, Joshua...¡Kia!, que lindo...

Pero basta. Fui a mi pieza y busqué algún libro para leer. Caminé por los pasillos, leyendo; me gustaba, pero, de repente...Choqué con una pared,¿era una pared?. Miré, sí, era una pared. Seguí caminando y leyendo, volví a chocar con otra pared. Pero esta pared me gritó, ¿Las paredes hablan?, no que yo sepa...

-¡Ten más cuidado, quieres!, una persona inteliugente no lee mientas camina, ¿Tienes bien el cerebro?- me gritó una voz, alcé la cabeza y me di cuenta de que no era una pared parlanchina, era Joshua.

¡Wow!, que musculotes entonces si pensé que era una pared. Seguramente tendrá unos musculos muy duritos.

-Perdón, soy un pocop descuidada- me sorprendió que, cuando alcé la vista, vi que no me miraba con odio, me miraba diferente...¡NO!, Vale, deja de divagar- Bien, lo siento de verdad, adios- me fui, de verdad que estaba divagando, pero... Creo que vi un poco de cariño, afecto, ¡Pero no, no podía!. Él no era así, ¿o sí?

Seguí caminando, pero ya no seguia leyendo. Sentí unos pasos a mi espalda y unos gritos.

-¡Hey!, ¡hey!, Vale, ¡espera!

Me voltee y no pude creer lo que vi: era él y ¡estaba conmigo!. La verdad, no podía expresarme bien ya que pensaba incoherentemente por el asombro.

-¿Qué quieres?, ¿insultarme denuevo?- le pregunté
-No, no era eso- me tomó por los brazos y me sostuvo con fuerza- quiero pedirte perdón
-¿Cómo?
-Lo siento mucho, te traté muy mal, no fue mi intención- parecía sincero.
-¿En serio?, bueno, la verdad es que te portastes bastante mal, pero no te preocupes... No ha sido para tanto- mentir era mi especialidad y, esta vez, lo hacía ya que me había herido realmente.
-¿He herido tus sentimientos?- Mierda, ¿cómo lo supo?- no me mientas, por favor
-Un poco- no estaba mintiendo del todo
-Perdón...bien...-¿Por qué vacila?- ¿Te parece que demos un paseo?, así podemos hablar y ... me puedo disculpar.
-Pero si ya te he disculpado.

Él sólo me sonrió y me hizo un gesto para invitarme a caminar, juntos, él y yo.
Comenzó a hablar, era simpático.

-¿Y cómo te llamas?- pausa...no quería responder- Yo me llamo Joshua Walker, creo que ya lo sabias- me sonrió.
- Me llamo Vale Aillón.
-¿Vale Aillón?, ¿existe el nombre Vale?, no es que no me guste pero... es raro.
-No me gusta mi nombre...por eso prefiero no decirlo
-Entonces no insistiré- Era la primera persona que no insistía, Vanesa había un completo escandalo para saber mi nombre, y Cristopher tampoco ayudaba mucho...¡Que agradable no tener que dar explicaciones!

Continuamos hablando, paseando, sólo quiero que esto no se acabe nunca y que sigamos juntos... Conversando, los dos.

[Cuenta Vanesa]

Jake me invintó a salir esa misma tarde, para comentar sobre nuestras vidas. Era muy simpatico. Caminamos frente a la tienda de artículos deportivos y el vendedor que nos atendió la otra vez. Estaba afuera terminando de pegar un afiche. Se da la vuelta y nos saluda con la mano y nos pide que nos acercaramos.

-¡Ah!, así que ya estas mejor- me dijo-todos los de por aquí nos llevamos un susto tremendo cuando calleron al agua. De no ser por su novio- ¿novio?...ojalá..Sentí como subía la sangre a mis mejillas.- y esos estudiantes nuevos, quizás estarían ahora en el fondo del mar. ¿Cómo esta el resto?
-Están mucho mejor- le contesto Jake. Me miró y como no decía nada, agregó:- Bueno, gracias por preocuparse

Y nos alejamos, traté de alejarme lo más rápido de ese señor antes de que volviera a decir algo sobre mi "novio". ¡Que agradable sería que lo fueramos!.

-¿Quieres ir a comer algo?- me preguntó mi "novio".
-Eh...Bueno...-no estaba muy segura si quería comer algo.

Entramos a un McDonalds. Jake ordeno una hamburguesa con una gaseosa y yo soo unas papas... No tenía hambre, era síolo por acompañarlo a comer.
Hablamos de muchas cosas, nuestras familias, nuestros hobbies, nuestro gustos, etc...Hasta que por estupida, se me salió lo que no debia decir nunca a nadie...

-Yo no creo mucho en leyendas mitológicas, ¿tu?
-A mi me encantan, en especial las de vampiros y licantropos- estaba tan contenta de poderconpartir eso con alguien como Jake que ni noté que se puso tenso.- Encuentro que son tan fascinantes, además se acercan tanto a la realidad que se podría decir que los puedes encontrar en casi cualquier lugar, ¿no te parece?.
-Emmm...si, eso creo...Vanesa, me tengo que ir, me olvidé de algo que tenia que hacer- se levantó- nos vemos en el instituto- se acerco como para despedirse de un beso el la mejilla pero vaciló y se fue así sin más.

¡Qué estupida soy!, ¡¿Cómo se me ocurre decir eso?!, ahora debe de cree que estoy loca...

Quizás no me vuelva a hablar nunca más.Genial...Acabo de descubrir como espantar a un chico: Hablale de vampiros y licantropos y todas esas estupideces y veras como sale corriendo. Y eso fue exactamente lo que hizo Jake, salió corriendo...huyendo de la más loca del lugar; o quizás del mundo entero...

Me levanté y salí lo más rápido del lugar. Me diriguí al bosque y lloré, ya está hecho...¡Que estupida! El chico que más me había gustado, el más lindo, más simpático, más amable y lo aullento en 5 min. Sonó mi celular, tenía ganas de tirarlo lejos pero eso sería estúpido. Era Marianne, lo más probable estaba preocupada porque Jake ya debía de haber llegado y yo tardaba demasiado.

-Hola...-que triste sonaba mi voz.
-¡Hola!,¿Dónde estas?, te estuve buscando por todos lados para decirte que ya te pedí "El Alquimista", te lo dejé en tu cama.
-Gracias...
-mmm...¿Qué pasa?
-¡Soy una estúpida!
-No lo eres, ¿Dónde estás?- sonaba preocupada
-En ningún lugar, ¿eso era todo?
-si, pero...
-Bien, adios- y colgé

No tenía ganas de estar con nadie, me quería morir, quería llorar. No quería estar con nadie, así era mejor.

Creo que me quedé dormida por un momento. Miré el cielo, era de noche...Busqué mi celular para ver la hora: las 00.45. guardé nuevamente mi celular en el bolsillo y me paré. Hacía frío así que me puse una chaqueta que llevaba atada a mi cintura. Miré alrededor para tratar de orientarme, cuando escuché un ruido. Creo que eran pasos.

[Cuenta Vale]

Corría, corría, corría.¿Dónde esta Vanesa?. Debía encontrarla, los recuerdos de esta tarde aún me atormentaban:

-Vanesa está mal...creo q está en el bosque- me dijo Marianne.
-Seguramente volverá; conociendola- En ese momento no le había tomado mucha atención. Vanesa era impertinente y un poco cabezota. Estaba segura que volvería.

Ahora, en cambio, ya eran las 00.50 hrs. y aún no regresaba. Por eso salí a buscarla. Lo medité mucho. Marianne me llamaría si Vanesa regresaba al instituto, pero si no llamaba...Era una mala señal. Antes de salir si, no pude evitar darme un gustito.

-¿Qué quieres, Vale?
-¡Serás imbécil!, ¡¿Cómo se te ocurre dejar sola a Vanesa ?!, ¿Acaso no sabes cómo es?- le grité a Jake.
-Si, pero...
-Lo quepasa es que eres un imbécil, eso pasa- Le mandé una patada- eso es lo que te mereces- Me fuí.

Maldito Jake. ¡Todo es su culpa!

-!Aaahhh!- era alguien; sonaba aterrorizada.

Me detuve en seco. ¿Era Vanesa? y si lo era. ¿Por qué gritaba?. En el bosque se podía encontrar cualquier cosa.

-Alejate, déjame sola, ¡¿Qué haces?!

No cabía duda de que era Vanesa y, estoy segura de que su situación no es nada buena. Apresuré el paso y llegué a una especie de claro, pero mucho más pequeño. Caminé sigilosamente. Sí, ahí estaba Vanesa con...No, no podía ser él. Joshua.

-¡Alejate!, ¿Qué haces aquí?, ¡pudrete!, fuera, ¡¡fuera!!- los gritos de Vanesa eran desesperados.

Joshua se acercó más a Vanesa.

-¿No será mejor preguntar que haces tú aquí?, en el bosque. Sola. Es peligroso- le dijo Joshua
-Entonces ándate, yo me voy enseguida.
-¡Tú no iras a ningún lado!- la toma de la polera y la levanta del suelo.
-Suéltame- dijo con voz ahogada.

Todo pasó rapidamente, pero igual logré captar algo. Vanesa cayó al suelo, luego de que alguien empujara a Joshua contra un árbol, no podía ver vien a quién lo había empujado porque estaba de espada a mí. Vanesa contemplaba todo esto boquiabierta, paralizada en el piso, sin moverse. Joshua golpeo a su atacante y lo tiro contra otro árbol, muy cerca de Vanesa. Si seguían así, terminarían golpeando a Vanesa, o incluso a mí. Joshua se acerco nuevamente a Vanesa.

-Alejate de ella, ¡no la toques!- era Jake, claro, demás que se sintió culpable- Asquerosa sanguijuela chupasangre - ¿sanguijuela?
-Sólo le iba a decir que volviera al instituto.
-¡Pues no te creo! - Jake se abalanzo sobre Joshua otra vez, y yo no me podía quedar de brazos cruzados.

Caminé hacia donde estaba Vanesa.

-¡Ya paren!, ¿Quieren?, ayuden a Vanesa- le dedique una mirada asesina a Jake, luego iba a arreglar cuentas con él.

Jake llevó a Vanesa en brazos, mientras que Joshua y yo los seguiamos.

-¿Qué hacias tú aquí?
-Me gusta pasear de noche, me relaja. ¿Y tú?, ¿buscando a Vanesa?- asentí- Te agrada mucho.
-Si, es muy simpática.
-Se nota- llegamos al instituto- Bien, ya es tarde, mejor duermes, no quiero que mañana andes con ojeras; seguramente te sentiras mal. Hasta mañana.- me sonroje.
-Si...Gracias- Tomé a Vanesa del brazo y caminamos hasta la habitación.

Marianne se relajó mucho, estaba muy nerviosa.
Me acosté pero no pude dejar de pensar en Joshua. Y así dormí, y soñe con él... Que me abrazaba y quería, simples niñerias, pero siempre terminaban en que él se convertía en un ser diabólico.


[Cuenta Marianne]

Hoy entramos a clases, Vanesa está con las tremendas hojeras junto conmigo. Todavía está asustada, pero de seguro que se le pasará. Vale...no anda con ojeras, ¿cómo lo hizo?

-Oie Vale, ¿cómo lo hiciste?- le pregunté
-¿Qué?, ¿las ojeras?-asentí- es un quita ojeras, es como una crema.
-Hum, tienes que prestármela
-Oie Vanesa, creo que tu la necesitas más que nosotras
-¡Vanesa!, ¡hey, sale de tu mundo!-Vanesa aún no contestaba-¿Estás bien?
-Agh, es obvio que no está bien- Vale se para al frente de Vanesa, la toma por los hombros y la empieza a sacudir desesperadamente- ¡¡VANESA POR DIOS DESPIERTA!!

La verdad quedé sorprendida y lo único que dijo Vanesa despúes de eso fue un "Gracias" muy bajito, apenas audible. Bueno, despúes de eso entramos a la sala de clases; escuchamos que sonó un timbre y entró una señora vestida muy elegantemente. Se veía pesadita.

-Buenos días, yo soy la Sra. Agata y seré su profesora jefe este año, no quiero que nadie rompa las reglas, o la anotación ira directamente a su expediente. Ahora...No me gustan sus puestos, vamos, parence. Yo los arreglaré a mi gusto.

A Vanesa la pusieron junto a Jake, a Vale con Joshua, a Chris con Annie y a mí con Noah. El resto iba en la misma secuencia. Bueno, aunque no estabamos entre amigas, estabamos con quienes queríamos. Algo me dice que este año va a ser muy entretenido.

Creo que en el curso no eramos más de 24 alunmos, asíque se podía mantener facilmente el silencio en la sala. Que fue lo que pasó durante las 2 hrs. que tuvimos con la Sra. Agata. Nos pasó nuestro horario, la lista de profesoresy ...nos dio una tarea para mañana. ¡No!, ¡Primer día y con una tarea! que fome...
Aparte de eso no estuvo tan mal.

-¿Y qué pensaron de la profe?- nos preguntó Chris despúes de que ya salimos de la sala, caminando hacia los lockers.
-Me gustaron los cambios de puesto que hizo, ¿no les parece?- dije mientras guardaba mis cuadernos.
-¡Siii!, a mi tambien me gustaron- contestó Vale.
-Opino lo mismo, ¿y tu, Vanesa?, ¿te gustaron los puestos?
-¿Ah?, see...me gustaron- se notaba rara, demasiado
-Vale, acompañame al baño, porfa- la tomé de la muñeca y la arrastré al baño- aquí hay algo que no me dijeron, ¿qué pasó exactamente, detalle a detalle, cuando encontrastes a Vanesa?
-Nada, ya te dije todo- se notaba un poco nerviosa, pero no mucho.
-¡Dime!, ¡es imposible que eso haya sido todo!- la miré directamente a los ojos- ¿Por qué no me quieres contar todo?- ¿que rayos habrá pasado?!!, me carcome la curiosidad...
-Bien, te lo dire...Cuando llegué donde estaba Vanesa...-y me lo contó absolutamente todo, sin interrupciones- y eso fue todo.
-Raro...Joshua es demasiad raro, ¿no te parece?
-Si, un poco. Pero no puedo hacer nada con eso
-oh, claro que podemos- ¿¡Quíen se creía que era para tratar a mi amiga de esa forma!?, ya se las iba a ver conmigo.
-¿Qué vas a hacer?
-Ya vas a ver- y sali del baño empujando la puerta lo más fuerte posible.

[Cuenta Vale]

Y vi... Salí corriendo tras Marianne, necesitaba estar segura de que no iba a hacer lo que creía que iba a hacer. No, no sería capaz, ¿o si?. Con ese animo parecía capaz de cualquier cosa.

Si... lo iba a enfrentar, era obvio. Traté de detenerla, la tomé del brazo. Trató de safarse pero la agarre fuerte.

-¿Qué vas a hacer?
-Pensaba acercarme tranquilamente a tu "amiguito" y decirle lo mucho que lo aprecio- no le conocía su lado sarcástico
-Tranquilizate, ¿ya?
-¡¿Cómo quieres que me traquilice si me cuentas lo que pasó y tú misma vez como está Vanesa?!
- Si, es verdad, pero...
-Da lo mismo, casi recorrí el colegio entero tratando de encontrarlo y parece como si leyera mi mente o algo porque no está por ningún lado.

Era cierto, recorrimos casi medio colegio antes de pararnos y nada de Joshua ni el resto de los Walker. Como si supieran donde estabamos o donde ibamos a buscar para evitarnos.

Las clases normales empezaban a partir de mañana, así que teníamos la tarde libre. Fuimos todos a la biblioteca a trabajar y después decidimos ir al centro a tomar un helado.
Lo pasamos bien en el centro, aunque de verdad Vanesa actuaba demasiado raro. parecía en shock o algo por el estilo. Espero que sea sólo por el momento y mejore pronto.


[Cuenta Vanesa]

Las chicas estuvieron toda la tarde tratando de animarme, junto con Christopher y sus chistes rancios. Pero, ¿cómo iba a poder quitarme eso de la cabeza?...Licantropos...Jake, el calor que irradiaba su cuerpo era tan... los ojos completamente negros de Joshua, tan amenazantes. Como si yo hubiera descubierto un secreto muy profundo de él...


Aquella noche tampoco puede dormir bien, toso me daba vueltas. Incluso las sombra en la habitación me asustaban y me recordaban la oscuridad del bosque.

Me levaté. Quizás un vaso de lecche tibia me tranquilice, o eso decían en las películas. No encendí la luz para evitar despertar a alguien. Lo último que necesitaba era que se preocuparan por mi hasta en la noche. Me escabuyí hacia la cocina, todo estaba oscuro pero aquí ya podría encender una luz sin molestar a nadie. Acerqué mi mano tanteando la pared hasta encontrar el interruptor. Lo accioné, pero no estaba sola. Alguien más quería un refiguerio nocturno:
Jake.

Me miró, cerró la puerta del refriguerador y me saludó.

-Hola Vanesa...

Yo no sabía que contestar o hacer. Si saludar, buscar mi vaso de leche e irme o simplemente irme. Opté por lo segundo, dí media vuelta y cuando iba a dar un paso más me tomó de la muñeca.

-Espera, ¿podemos conversar?, se que no es el mejor momento ni lugar pero, ¿quieres?.

No le respondí por temor a que me fallara la voz. Me encogí de hombros y asentí. ¿Qué quería conversar? ¿Acaso me iba a exxplicar por qué me dejo plantada, cómo me encontró en el bosque o qué?. Porque yo no le veía respuesta lógica a todo eso.

-Será mejor que te sientes porque puede que tarde un poco en explicarme- me atrajo una silla y me sente- Bien...¿te acuerdas de la conversación en el restaurant?- asentí.

Recordaba todo con mucho detalle para mi gusto.

-Ya...Creo que primero debería pedirte disculpas por dejarte sola ahí- prosiguió- Pero cuando dijiste eso de los chupasangres y hombres-lobo fue como si...Bueno, nadie habla de ellos así con tanta naturalidad como tú lo hiciste.
-No era necesario que me dijeras rara a mitad de la noche, bastaba con que te hubieras ido ese día.

Me disponía a irme, pero continuó.

-No, no te estoy diciendo rara, es simplemente eso: nadie habla de ellos con tanta seguridad. Ya que casi nadie cree en ellos...sólo los...los que...lo son.
-¿Qué?, claro ¡ahora me dices que existen sólo para que después termine en un loquero!
-No, por favor. Tienes que creerme- parecía como si dijera la verdad- Todo lo que dices... lo que crees...todo...

Parece que le costaba mucho decirlo.

-¿Por qué yo debería creerte?
-¡Ya sé! Miira, puede serpeligroso, pero...Pero quizás así me creas.
-¿Qué?, acaso vas a traer un hombre lobo aquí y ahora?
-No, te voy a mostrar uno convertido. Pero no aquí, no ahora.Emm...¿Qué te parece el viernes despúes de clases? En el claro del bosque, ¿aceptas?
-Sólo espero que no me mientas.

Me paré, dejé la silla en su lugar y Jake me acompañó en el corto trayecto de vuelta hasta mi habitación

-Te espero ahí entonces. Buenas noches- se despidió.

Me meti en mi cama y, por primera vez en tantos días, dormí placidamente.


[Cuenta Marianne]

Me levanté muy perezosamente. Estirando cada extremidad por separado. Como odio los cambios de hora. Una hora menos para dormir *bostezo*. Me empecé a levantar. Creo que las chicas no cambiaron la hora de sus relojes, o por lo menos Vale no. porque ese maldito reloj de *bostezo* despierta a todo el mundo. Me acerqué a su cama y recordando cómo ella me había despertado antes de un almohadazo tomé su reloj y puse la alarma para dos minutos más y lo ubique fente a su cara. Miré mi venganza de lejos. Si, con eso bastará y me fui a las duchas, jejeje.

Desde ahí escuché el grito de Vale:

-¡AAAAHH!, ¡MALDITO RELOJ DE M*****!

Cuando volví Vale no estaba en la pieza, que suerte. De seguro que si me ve me mata, y definitavamente no quiero morir tan joven. Tomé mi mochila y me fui.

Ya en clases sentía la mirada de Vale en mi espalda, como si me pudiera quemar con ella. La Srita. Agata nos fue llamando por orden de lista para entregarle el trabajo, pero cuando llegó hasta Chris fue cuando la vimos enojada.

-¡¿Cómo se le pudo olvidar el trabajo?!, ¡Este es el primero de tantos trabajos que doy y usted ya se olvida del primero, quizás cómo va a ser con los otros!
-Pero...pero si yo lo hice- Chris se veía asustado, ¿quién no?
-¡Nada de peros!- se acercó a la puerta- ¡Vayase a la rectoría y quedese ahí por lo que quede de clase!

Que mala pata la de Chris. Él si había hecho el trabajo, lo había hecho junto con nosotras en la biblioteca, ¿cómo se le pudo olvidar?. Que mala onda, la profe ya le tomo en mala. Ahora se va a tener que conseguir la materia.

-Bien- dijo la profe- ahora por culpa de su compañero van a tener que hacer un informe sobre la responsabilidad, lo que significa, cómo aplicarla en la vida diaria y de donde proviene la palabra.

¡¿Qué!?, vieja mala onda, se pasó de mala clase...

Fue un alivio cuando tocó el timbre y nos libramos de ella.


[Cuenta Vale]

¡Serás maldita!, Marianne, juro que después de esto te voy a hacer la vida imposible...Aunque ya a pasado un día y no he hecho nada, pero ¡ya veras!...

Hoy martes al la primera y segunda hora nos tocaba lenguaje, ¡Abrir el día con lenguaje!, ¡Que fome!

La profe nos llamó por nuestros trabajos que nos habia dado ayer y ...

-¡No sabía qe había un trabajo para hoy!, no estaba en la clase porque usted me sacó...-replicó Chris.
-Pero pudo haberse conseguido lo que se paso en la clase, que lo haya expulsado de la sala de clases no es motivo por el cual no haya traido su informe. Eso dice mucho de usted, es un irresponsable y a la proxima vez no no me presente algo, un informe, una tarea, lo que sea; la anotación irá al libro y quedara condicional de las actividades de este semestre.¿Entendido?
-Si, profesora...
- Ahora vaya a sentarse.

Que lata, pobre Chris. ¡La vieja mala onda!, si ella tuvo la culpa por echarlo de la sala y dar esa tarea de un día a otro...¡La odio! y demás que todos piensan lo mismo.

Pasaron las dos horas y yo me las pasé sola. Joshua no llegó, ¿me estaba evitando?, y si lo hacia ¿por qué?...Tal vez por lo del bosque.
Pasé todas las horas de clase sola, cuando terminó la jornada me puse ropa linda y salí fuera del instituto, a el bosque, al lugar donde había ocurrido el accidente.

Me arrodillé en el pasto, era un lugar muy lindo, había mejores, pero era lindo. A parte de que costaba llegar allí, me perdí varias veces. Eso lo hacía más lindo.
Pasaron los minutos, estaba cada vez más relajada. Este lugar es mágico, relaja y da paz. Me estaba quedando dormida cuando escuché pasos acercandose. Me paré y comenzé a caminar hacia donde provenían los pasos.

Capítulo nº 2: “Porvenir”

[Cuenta Vanessa]

Nos detuvimos frente a un gran lugar, el conductor dijo que aquí era así que todos bajamos.¡Era hermoso!, tenía amplios jardines al frente con una pequeña fuente al centro, además de arbolitos y arbustos con flores ordenado todop para crear el mejor efecto a la vista; en el fondo se extendía glorioso el intituto, era de madera, lo que le daba un toque hogareño.

-¡Wow!,¡es tan hermoso todo!- al parecer no era la única deslumbrada por el nuevo intituto en el que ibamos a estudiar.

Todos murmuraban cosas sobre lo lindo del nuevo instituto, hasta que llego una monja a recibirnos junto con un señor, ¡¿era colegio de monjas?!

-Bienvenidos, chicos, chicas, espero que disfruten su estadia en el nuevo instituto "Porvenir" -dijo, él debía de ser el director del colegio, era un señor alto, con pelo negro y un poco bronceado, pero con cara amable- Yo me llamo Victor Nuñez y seré el dicector del instituto.Como ya debieron de haberles comentado en sus respectivos colegios, pasaran aquí 2 años de su enseñanza, fueron seleccionados ustedes 10 alumnos por sus destacadas notas, buena asistencia y comportamiento. A continuación les dejo con Sor Ingrid, que es la encargada del internado.
-Buenos Días- era vieja pero se veía cariñosa y llevaba una vestimenta plomiza que la cubría completamente, al igual qe a todas- comodijo el director, yo soy la encargada del internado junto con otras monjas, espero que disfruten mucho su estadia aquí y que no duden en preguntar si tienen dudas; sae podran levantar a la hora que prefieran hasta Marzo cuando ya empiecen las clases, donde ya debera respetar el horario del instituto, exceptuando los fines de semana que podrán volver a sus hogares o quedarse si así lo prefieren. Ahora daremos un tour por el colegio.
-¿Qué les parece si los hombres vienen conmigo y las mujeres van con Sor Ingrid?- dijo el director, y así lo hicimos.

Eramos 6 mujeres y 4 hombres, ellos se fueron por el pasillo hacia lña izquierda y nosotras por el de la derecha; Sor Ingrid resultó ser muy cariñosa, nos enseño las salas especiales para cada taller correspondiente y las salas de clases. Al último nos llevo hasta nuestras habitaciones, las cuales ya estaban nuestras cosas; se separaban de los chicos en dos escaleras separadas que tenian en común un hall.
Las piezas eran de 3 personas cada una; las otras dos chicas igual eran simpaticas, así que para no dejar a una de nosotras sola decidimos quedar así:
-Pieza 1: Marianne, yo y Sonia
-Pieza 2: Vale, Poly y Patricia.

Las duchas ya eran más comunitarias, 15 duchas para hombres y 15 para mujeres, es decir, que seria una ducha para dos personas, ya que el internado era para 60 personas entre hombres y mujeres. Espero quenos divirtamos mucho aquí....


[Cuenta Vale]

¡Que lindo era el lugar!, no de mi entero agrado pero era lindo, mi único problema eran... no es por ser mala pero creo que me va a costar adaptarme a las monjitas, no es que no me gusten, pero cuando chica estuve en un colegio en que las monjas eran malas, muy malas, aunque estas parecían buenas, eso es...¿bueno?

-¿Podemos recorres el instituto?, me refiero, solas- le pregunte un poco titubeante, era un problema ponerse nerviosa al frente de las monjitas.
-Claro, las dejaré solas, seguramente están agobiadas y necesitan un poco de privacidad.

Se alejó y nos dejó a nosotras 6 en la puerta de nuestras habitaciones, que estaban continuas, eso me agrada mucho.

-Mmmm... yo me voy a cambiar de ropa, fue un viaje muy largo- les comenté a las chicas.
-¿te vas a cambiar de ropa?, ¿por qué?, no esta sucia- dijo Marianne
-Pero me quiero cambiar de ropa- dije, la verdad es que sentía que necesitaba con urgencia cambiarme de ropa.
-Bueno, ¿quién soy yo para decir que no?

Me fui a mi habitación y me acerqué a la ventana, tenía una vista muy linda, daba a los jardines y llegaba mucha luz a la habitación que era espaciosa, habría apostado que entraba otra cama.
Me cambié de ropa y me puse unos jeans oscuros, unas bota y polera manga 3/4, junto con una pañoleta morada que usaba a modo de bufanda y salí a paserar con las chicas, me encontré solo con Marianne y Vanesa, al parecer las demás se habían ido.

Descubrí muchas cosas, había una sala de computación, un laboratorio muy completo con un esqueleto un poco terrorífico; recorrimos las cocinas, los baños, todo, lo único que no nos atrevimos a visitar fue las habitaciones de las monjitas, tienes cierto toque que te atrae pero que a la vez sabes que esta mal...raro, ¿no?


[Cuenta Vanesa]

Lo pasamos muy bien todo el mes de Enero,que lo dedicamos a conocer Porvenir y sus alrededores. Ya estabamos a 9 de Febrero, pasó muy rápido el tiempo.

-Oigan- dije- estaba pensando que para aprovechar estas 3 semanas podrías navegar en bote.
-¡Sí!- dijo Cristopher
-Saben, he visto gente pescar por aquí, podríamos aprovechar el bote para aprender a pescar, sería entretenido aprender- comentó Marianne- aunque pesquemos solo una lata de Coca-cola.
-A mí me parece una idea genial, pero yo ya se pescar...- ¿Vale sabía pescar?
-Entonces tú nos enseñas a pescar-dije
-Bueno...- y se encogió de hombros
-¿Alguna sabe donde se puede arrendar un bote y comprar o arrendar las cosas?- dijo Marianne
-¡Yo se!, cerca del muelle hay un local que vende las cosas para pescar y en el muelle arriendan botes- se notaba que Cristopher estaba bastante emocionado por esto
-Vamos entonces.

Empezamos a diriguirnos al muelle.

- Esa de ahí es la tienda- dijo él, y nos senaló una pequeña tienda azul oscuro con un letrero que decía "Artículos Deportivos"- y allá se arriendan los botes- dijo esto señalando una caseta al lado del muelle en la cual había un cartel que decía así: "Botes y tours, favor de reservar antes"- vayamos allá primero para reservar un bote.


[Cuenta Marianne]

Caminamos hacia la caseta y poasamos frente de la tienda deportiva, en la vitrina se veían muchas cosas para la pesca y carteles pegados acerca de la temporada de caza y tours por los icebergs. Y no me había dado cuenta hasta que se acercó a la ventana a coger una caña de pescar, que dentro estaba el chico que le gustaba a Vanesa...Mmmm... podría hacer algo por ella... si le digo, lo más probable es que no quiera pescar por temor a hacer el ridículo frente a él y peor si se encontraban en la tienda o si a él se le ocurre ir a reservar un bote ahora...

-...-no sabía que decir, ¿comó irme sin que se dieran vuelta hacia la tienda?- ... emm, chicas...- me miraron, por lo menos tenía su atención- voy a ver algo en la tienda mientras, confío en que encuentren un bote decente para mañana.
-Claro, ve no más después vamos para allá- me contestó Vanessa.
-Yap...-siguieron avanzando, tomé a Vale del brazo y le susurre- demorense, tengo que hacer algo...- y le señalé con la cabeza la tienda
-Aaaa- ella sabía como reaccionaría Vanesa- dale, haz lo que puedas, yo te cubro- y se alejó.

Bien, entré en la tienda, ahora ¿que hago?, me acrequé al mostrador donde todavía lo estaban atendiendo, no había nadie más, eso podría jugar a mi favor.

-Disculpe- le dije al vendedor para llamar su atención- ¿vende anzuelos para pescar?
-Sí, se los traigo- se alejó y salió por una puerta.

El chico estaba mirando una caña que quizás iba a comprar.

-Oie- le dije y me miró- tú estas de interno en el instituoto, ¿cierto?, entre los 10 mejores alumnos- era un comienzo, pero servía para romper el hielo.
-emmm...- me miró más detenidamente, como tratando de rerconocerme- si, ¿tu también?
-Si, soy Marianne Negrón, ¿tu?- dije esto tendiendole la mano.
-Jake Ross- me estrechó la mano, que estaba bastante caliente...que extraño...
-¿sabes pescar?- miré hacia afuera para ver donde estaban las chicas, todavía estaban en la caseta.
-Si, un poco

Entró el vendedor con unas cajas plásticas.

-Tome señorita, estos son todos los anzuelos- me evaluó como clienta- pero si es su primera vez, le recomiendo estos- y me acercó una caja del montón
-Gracias- abrí la caja y me diriguí a Jake- ¿te puedo hacer una pregunta?
-eeh, claro
- Es que con unas amigas se nos ocurrió tratar de aprender a pescar, pero no sabemos casi nada, solo una que sabe pocco y parece que tu sabes mucho- mire por la ventana, ya se estaban acercando- ¿te molestaría enseñarnos?
-no, ningún problema, pero ¿tienen un bote?
-A eso fueron mis amigas, a arrendar uno por estos días- en ese momento entraron las chicas- y ellos son mis amigos; ella es Vale, Cristopher y Vanessa- les señalé mientras los nombraba, Vanessa estaba realmente sorprendida.
-Hola
-Hola- dijeron Vale y Cris al unísono
-¿Cómo les fue con el bote?- le pregunté a Vale
-Muy bien, mañana Miércoles y Jueves está para nosotros
-Bien, porque me tomé la libertad de preguntarle a Jake si nos enseñaría a pescar, porque, sin ofender Vale, pero no confío mucho en tus tacticas.
-Gracias- me miró de forma amenazante
-Entonces para mañana nos juntamos aquí como a las 6 de la mañana, ¿te parece?- le pregunté a Jake
-A las 5:00 mejor, mientras más tenprano es, más peces hay- me contestó
-Ya, dale; gracias

Jake le entregó la caña al vendedor y se retiró.

-¿Cuál de todos los anzuelos me recomienda?

Y dediqué toda mi atención al vendedor para evitar las preguntas de mis amigas y posteriores gritos de Vanessa y todo su nerviosismo por hacer el ridículo. Además de las quejas de Cris de que era demasiado temprano y teníamos que disfrutar las vacaciones durmiendo hasta tarde.