19/3/10

Capítulo n°5: "Citas"

[Cuenta Vanesa]

Viernes, Viernes, al fin Viernes. ¡Conoceré la verdad de Jake!. Estaba en la cafetería tomando desayuno junto a Marianne.
Comenzamnos a hablar hasta que tocó la campana para ir a clases. Vi a Vale pasar muuy lentamente hacia la sala.

-HOLA VALE-grité, Vale me miró y sonrió.
-Hola chicas, Vanesa...Jake te anda buscando- ???.
-¿Cómo lo sabes?
-Porqué esta ahí- apuntó hacia atras- y te hace señas.

Me voltee y le dije "gracias y permiso" y fui corriendo donde Jake.

-Menos mal que me pescaste.
-Perdón...
-Da igual, ¿Quieres ir a clases conmigo?

Entramos en la sala. Hoy a las 2 primeras horas nos tocaba Historia con la señora (no señorita, es más vieja) Rosa.¡es demasiado, ultra mega aburrida!

-Llegan tardes- nos dijo.
-Perdón- dijimos con Jake al unísono.

La hora pasó aburridísima, en un momento Jake me tomó la mano. su tacto me quemaba y cuando digo "quemaba" es que de verdad quemaba.

-¿Jake?- susurré- ¿estás bien?- sintió- Te arde la mano, ¿tienes fiebre?
-Si tuviera fiebre tendría las manos heladas, ¿no?.- susurró.
-Ammm...-que tonta.

La hora terminó y jake me invitó a pasear con él en el recreo. Estuvo muy tierno, y más de algunas vez me abrazó con fuerza.


[Cuenta Marianne]

Parece que Vanesa y Jake se gustan. Y mucho.

-Están muy acaramelados.- me dijo Vale.
-Si, se ven muy lindos.

El día pasó rapidamente hasta que fue la íltima hora de clases: Lenguaje con la señora Agata. Esta vez no retó a Chris por nada...por suerte.

-Vale- le susurré- ¡Vale!- Joshua me miró y le mandó un golpecito a Vale para avisarla de que la estaba llamando.
Ella tomó un papel y escribió. Cuando llegó a mí, decía:

"¿Qué quieres?"

Tomé el papel y escribí rápidamente:

"En la tarde ayúdame a encontrar una tenida bonita, ¡please!. Es muy importante"

Ella rió y respondió:

Claro.

En la tarde, Vale hizo un muy buen trabajo. De verdad es que me veía estupenda. Me había prestad un vestido sobre la rodilla color pistacho con unas calzas negras, y un chaleco negro fino y delicado.

-¡Que delicada te ves!- me dijo cuando terminó de maquillarme.

Me miré en el espejo.

-¿Quién es?
-Tú pues tonta.
-¿En serio?
-¿Está muy mal?
-ESTÁ INCREIBLE; GRACIAS, GRACIAS.

Ya estaba lista. Voy a por Noah.


[Cuenta Vale]

Estaba con Chistopher hablando de puras trivialidades.

-¿Dónde están Vanesa y Marianne?
-En sus citas...¿Donde está Annie?
-Está en su casa, su mamá se enfermó.
-Aaaa...Deberías acompañarla, debe estar muy aburrida
-Si, es cierto...

Sentímos un ruido como de algo de un vidrio quebrandose. Bajamos corriendo la escalera y vimos a Camila, una chica de nuestra clase que es muy descuidada, que había tropezado y se había caído, rompiendo el plato y el vaso que llevaba en la mano. Por surte lo llevaba de vuelta a la cocina, por lo que no había nada más que vidrio roto.

-Dejame ayudarte.- Le dije, y me arrodillé a su lado y la ayudé a recoger los pedazos.
-Si, creo que voy a ir a verla- Me dijo Chris y recogió unos cuantos vidrios, los botó y se despidió.-Adios chicas y cuidado Camila.
-Adios- dije.

Terminé de ayudar a Camila y volví a mi habitación. Estaba tan aburrida...


[Cuenta Vanesa]

Jake y yo estabamos en el centro de Porvenir y nos diriguíamos al bosque. ¡Qué lindo es!. Él me había dicho que quería cumplir su promesa.
Llegamos a centro del bosque. Me dijo que esperara y él se marchó, así que me senté en un árbol en forma de V. De la nada apareció un lobo muy grande y lanudo de color rojizo. Me asusté y me levanté casi por inercia. Pero el lobo no quería atacar, al contrario, me miró a los ojos. Unos ojos conocidos, familiares. Se acercó más hasta que pudiera tocarlo.
Le acaricié la cabeza. Me volvió a mirar y se fue trotando...Que extyraño fue eso...Al instante volvió Jake, quién me miró y reconocí en ese instante esos hermosos ojos de aquel lobo.

-¿Ahora me crees?- dijo Jake, tomándome las manos.
-Si...pero,¿Cómo?. No entiendo nada de nada.

Y me rugieron las tripas.No había comido casi nada desde el desayuno por lo nerviosa que estaba. Jake me miró con cariño y rió.

-¿No prefieres y ir a comer algo primero?. Si quieres te explico mientas comes.
-Bueno. Gracias- ¡malditas tripas idiotas!, ¡las odio!.

Fuimos a un restaurant, el más elegante que había en Porvenir; que no era tan elegante como para ir de etiqueta ni nada por el estilo.
Cuando estabamos entrando me tope con Marianne. Nos tratamos de sentar lo más lejos de mi amiga pero quedaban pocas mesas y nos podíamos ver y oir perfectamente si ponía atención. El mesero nos atendió y trajo lo que ordenamos.

-¿Qué quires saber primero- me preguntó Jake.
-No se...Simplemente se que quiero saberlo todo. ¿Qué te parece si empiezas por cómo te convertiste en hombre-lobo?

Que extraño era salir ahora con un hombre lobo. Pero no me molestaba en lo absoluto. En realidad sólo lo hacía más emocionante.
Antes de que Jake comenzara a habar vi a Marianne y Noah que salieron muy rápido del restaurant. Parecían incómodos. ¿Qué querrán hacer? En mi mente comenzaron a surgir multiples hipótesis. ¡No!, imposible. Jake habló y centré toda mi atención en él. La vida de Marianne no debía importarme. Bueno, sí, ¡pero no!, eso ¡no!.


[Cuenta Marianne]

Noah me indicó que lo siguiera. ¿ A donde me llevaba?. Entrelazó sus dedos con los mios. Mi corazón comenzó a latir rápidamente. De repente Noah se detuvo. Habíamos caminado hasta un campo, a la salida de Porvenir. La verdad es que no me di cuenta de cuanto tiempo había pasado, cuantos kilómetros había caminado, lo único que me importaba era estar con Noah. Sólo con Noah y que ese momento no terminara nunca jamás. Quería que Noah me quisiera, que yo fuera importante para él.
Me ruboricé y él me miró. Parecía perplejo. Una tranquilidad inmensa reinaba en el campo, en el lugar donde estabamos, en todo mi cuerpo. Noah suspiró y me miró a los ojos. Esos hermosos ojos de un celeste pálido que me derretían y hacían que me perdiera en ellos.

-Deberías salir corriendo- dijo Noah, sacandome de mi ensimismamiento.- De verdad, es por tu bien. Deberías huir de mí- Sin embargo no me soltó las manos, es más, las entrelazó aún más.
-Pero yo no quiero, me gusta estar contigo. Me siento feliz- No era que en otras ocasiones no estuviera feliz, pero esto era una felicidad diferente, que me embargaba completamente.

Noah me abrazó. Su cuerpo era como una piedra. Pero de todos modos no me molestó, me reconfortó.

-Hazme un favor- me dijo- Te voy a decir un secreto. No le digas a nadie- asentí- Bien, Tu crees en vampiros, hombres lobos y esas cosas- asentí por segunda vez- Bien,digamos que yo igual creo... Pero porque lo he visto. Es más, yo...pues...yo-Se quedó callado, yo podía suponer lo que iba a decir, pero era imposible. A este paso Noah no va a terminar de decir yo.
-Tu eres un vampiro-completé. Me estaba agarrando para el leseo. Lo sabía, ¿o tal vez no?. esperé toda mi vida para ver uno, pero...no se. ¿Noah era uno?
-Si- quede en blanco- Si, soy un vampiro. Consumo sangre, estoy muerto- me apretó contra su pecho- ¿Escuchas mi corazón?
-No-susurré muy por lo bajo.
-Soy un vampiro- concluyó- y te puedo matar.
-¿Serías capaz?.

1 comentario:

LuleKooks dijo...

Me estaba gustando mucho su historia. Mucho. Hasta que leí la palabra "vampiro"....